Profesionales que Inspiran: Marcelo Cotignola de Inim

Ser reconocido en la industria: una recompensa al esfuerzo

“Ser reconocido en este sector es un verdadero orgullo”, afirma Marcelo, quien dio sus primeros pasos en la industria a los 18 años como instalador, sin imaginar que ese comienzo sería el inicio de una trayectoria profesional marcada por el crecimiento, el esfuerzo y la superación personal. A lo largo de los años, fue escalando posiciones en importantes compañías del sector, guiado por una ética de trabajo inquebrantable. 

Para él, el secreto de su recorrido se basa en la constancia: “Con compromiso, pasión por lo que uno hace y valores, no se tienen límites”. Sin embargo, más allá de los logros visibles o el reconocimiento profesional, Marcelo destaca que lo verdaderamente significativo ha sido el impacto humano de su camino. “Lo más valioso es haber generado relaciones de confianza y haber dejado una huella positiva en las personas con las que trabajé”, expresó dejando en claro que, para él, el éxito se mide tanto en resultados como en vínculos duraderos.

Los inicios laborales y una carrera forjada paso a paso

Su trayectoria profesional comenzó en 1996, mientras aún cursaba sus estudios en istración de Empresas, cuando se incorporó a Seguridad del Tercer Milenio como instalador. Esta experiencia inicial marcó el inicio de una carrera próspera en el sector de la seguridad electrónica. Con el tiempo, la empresa fue adquirida por ADT, una compañía donde llegó a ser el Jefe Técnico gracias a su dedicación y habilidades técnicas. Sin embargo, su carrera dio un giro decisivo cuando decidió mudarse a España, una decisión que, en sus propias palabras, representó “un gran paso que me permitió crecer profesionalmente”. 

En suelo europeo, continuó consolidando su experiencia en empresas de renombre como Tyco Safety Products y Napco. Finalmente, en 2011, se unió a Inim Electronics, donde asumió el desafío de posicionar la marca en un mercado prácticamente virgen para la compañía. “He desarrollado la marca en un territorio donde prácticamente no se conocía”, afirma con orgullo, reflejando el impacto tangible de su trabajo en la expansión y reconocimiento de la empresa en la región.

Las claves del éxito: pasión, adaptación y servicio

Marcelo atribuye su evolución profesional a una combinación de actitudes personales y competencias adquiridas que fue cultivando de manera constante a lo largo del tiempo. Para él, el motor de su crecimiento ha sido la pasión por su trabajo “La clave ha sido la pasión por lo que hago, junto con la perseverancia y la capacidad de adaptarme a diferentes entornos y culturas”, explica. Esta flexibilidad no solo le ha permitido integrarse con éxito en equipos diversos y enfrentar desafíos complejos, sino también mantener siempre la claridad respecto a su propósito profesional. 

Otro de los pilares fundamentales que Marcelo destaca en su recorrido es el conocimiento técnico que incorporó durante los primeros años de su carrera. “Me ayudó mucho tener una base técnica desde el comienzo, lo cual me permite entender bien el producto y comunicarlo con claridad a los clientes”, afirma. Esta comprensión de los aspectos técnicos no solo le otorgó confianza y credibilidad, sino que también fortaleció su capacidad para establecer un puente sólido entre las necesidades del cliente y las soluciones que su trabajo puede ofrecer. A esto se suma un principio que ha guiado cada etapa de su trayectoria: la vocación de servicio. “Por sobre todas las cosas, la vocación de servicio hacia mis clientes”, puntualiza, destacando que no solo es un compromiso con la compañía sino con sus clientes.

El desafío de posicionar una marca desconocida en Latinoamérica

De todos los desafíos que ha enfrentado a lo largo de su trayectoria profesional, hay uno que resalta con particular orgullo y significado: la introducción y el posicionamiento de la marca Inim en el competitivo mercado de Latinoamérica. “Fue empezar desde cero”, recuerda, “abrir puertas en mercados desconocidos, explicar quiénes éramos, demostrar el valor de nuestros productos y, sobre todo, construir relaciones de confianza duraderas con clientes y socios estratégicos”. 

La tarea no fue sencilla, especialmente considerando que Inim debía competir frente a marcas ya consolidadas y reconocidas en el sector. Sin embargo, mediante un enfoque basado en la constancia, la cercanía con los clientes y una estrategia comercial paciente y bien estructurada, logró superar las barreras iniciales y establecer una presencia firme en la región. “Hoy, ver cómo Inim ha crecido y se ha ganado un lugar de respeto en el mercado latinoamericano es, sin duda, una de las mayores satisfacciones de mi carrera”, afirma con orgullo.

Una mirada hacia el futuro del sector de la seguridad electrónica

Marcelo opina sobre la evolución del sector y afirma que se encuentra en un momento de profunda transformación. Hoy en día tiene una visión clara sobre el rumbo que tomará la industria: “Veo un futuro muy dinámico, impulsado por la innovación constante.” Para él, el mercado se está orientando hacia soluciones cada vez más integradas, capaces de conectar múltiples sistemas y tecnologías en un ecosistema cohesionado y eficaz.

En su análisis, la integración tecnológica es el eje del cambio. “La integración entre sistemas de protección contra incendios, intrusión, videovigilancia, domótica y la inteligencia artificial está transformando la forma en que entendemos la seguridad.” Esta convergencia de tecnologías no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también redefine la experiencia del , con soluciones más intuitivas, proactivas y centradas en la prevención. 

La innovación, según Marcelo, ocupa un lugar central e irremplazable en este proceso. “La innovación es el corazón del desarrollo en este sector”. Ya no se trata únicamente de responder ante los incidentes, sino de anticiparse a ellos mediante herramientas como el análisis de datos y la interpretación de imágenes en tiempo real, que permiten tomar decisiones más rápidas y precisas.

Para Marcelo, la tecnología no es un fin en sí mismo, sino un medio para alcanzar un propósito mayor: “La tecnología es fundamental, pero lo más importante es cómo la aplicamos para mejorar la vida de las personas y proteger sus bienes.”

Consejos para quienes comienzan en la seguridad electrónica

Marcelo también compartió una serie de consejos para los jóvenes que están dando sus primeros pasos en la industria. En primer lugar, destaca la importancia de mantenerse en formación continua: “Les diría que se mantengan en formación continua, que no subestimen el valor de aprender desde lo técnico, incluso si su camino va hacia lo comercial.”

Además, destaca la importancia de cultivar la paciencia y de buscar referentes que puedan guiar el camino. En sus palabras: “Que sean pacientes, que busquen mentores, y sobre todo, que actúen con integridad.” Según su perspectiva, la paciencia es esencial en el proceso de crecimiento, ya que los resultados no llegan de inmediato. 

A su vez, enfatiza que uno de los pilares fundamentales para lograr el éxito a largo plazo radica en la construcción de vínculos sólidos y duraderos. Como él mismo afirma: “Este es un sector donde las relaciones a largo plazo lo son todo.” De este modo, resalta que, más allá de las habilidades individuales, las conexiones y el compromiso a largo plazo con las personas son determinantes para triunfar en su campo.

Vida personal: el valor de la familia y el tiempo compartido

Marcelo se define en su vida personal como una persona enfocada a su entorno más cercano, valorando especialmente el tiempo que puede compartir con su familia y amigos. Como él mismo expresa, “me encanta viajar, compartir tiempo con mi familia, y armar planes divertidos los fines de semana”. 

Este equilibrio, que busca día a día, es fundamental para él, pues entiende que la exigencia laboral no debe ir en detrimento de los momentos de calidad junto a los suyos. Además, en su tiempo libre, dedica espacio a actividades recreativas que le permiten mantenerse activo y desconectar de las presiones del trabajo. “Me gusta jugar al pádel, es una forma de desconectar, hacer ejercicio y divertirme con amigos”, comentó.

El desafío de equilibrar trabajo y vida personal

Marcelo es consciente de que no siempre resulta fácil encontrar el equilibrio perfecto entre las demandas de su carrera y su tiempo personal. Sin embargo, hace un esfuerzo constante por organizar su vida de manera que pueda disfrutar tanto de su faceta profesional como de su vida privada. Tal como él mismo señala, “cuando el trabajo me lo permite, trato de aprovechar al máximo el tiempo libre con mi familia”, lo que refleja su compromiso por dedicar tiempo de calidad a los suyos, a pesar de las exigencias laborales. 

Para él, la clave de todo está en una planificación eficiente, que le permita atender ambas áreas sin sacrificar ninguna. “Creo que es fundamental organizarse bien y saber cuándo parar. El equilibrio viene de valorar lo personal tanto como lo profesional”.

Cómo quiere ser recordado: compromiso, pasión y humanidad

Al reflexionar sobre el legado que desea dejar, Marcelo resalta la importancia de su forma de trabajar y de relacionarse con los demás. "Me gustaría que me recuerden como alguien comprometido, que siempre dio lo mejor, que supo construir desde cero con pasión y que nunca perdió la cercanía con las personas". 

Para él, lo fundamental no solo ha sido el resultado de su trabajo, sino la manera en que se ha relacionado y ha mantenido su autenticidad en cada etapa de su carrera. Su aspiración final resume perfectamente el espíritu que ha guiado su trayectoria profesional: "Alguien que dejó una huella positiva, tanto por su trabajo como por su calidad humana." Para Marcelo, la verdadera satisfacción radica en haber logrado un equilibrio entre la excelencia en lo profesional y la calidez en lo personal, creando un impacto duradero en quienes lo rodearon.